Disfrutar de las deliciosa gastronomía poblana mientras caminas por sus hermosas calles, sin duda es algo que te dejará con el mejor de los recuerdos.
Esta ciudad es culturalmente conocida por la elaboración de su emblemática Talavera, un tipo de cerámica que hasta la actualidad es trabajada por los alfareros poblanos, y que en 2019 su proceso de fabricación fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Seguro te complacerá estar aquí 3 horas, durante las cuales podrás caminar por los barrios antiguos que te conducirán a una de las panaderías más famosas para disfrutar del olor del pan recién horneado y probar exquisitos antojitos poblanos como la famosa cemita poblana, platillo característico del lugar, conformado por dos panes comúnmente adornados con ajonjolí y una mezcla de sabores dentro, entre las que se puede elegir: carnes frías, pechuga de pollo u otros, combinándolas con 3 ingredientes que no podrían faltar para darle ese peculiar sabor: chile chipotle, quesillo y hojas de pápalo.
Además, observarás el proceso del nixtamal (cocción de los granos de maíz en agua con un poco de cal) al cual se le conoce como nixtamalización, que es precisamente lo que le da ese sabor tan único a la tortilla mexicana y que rara vez encuentras en cualquier tortillería de la ciudad; continuarás avanzando por las calles bajo la orientación del guía turístico que te irá explicando más sobre la típica comida poblana.
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